Del peor al mejor día de tu vida

Las circunstancias y el ambiente que nos rodea tienen influencia sobre nosotros, pero nosotros somos los únicos responsables de lo que hacemos. Shakespeare

¿Te has preguntado alguna vez por qué cuando estamos en un mal día, todo parece ir de mal en peor? Y encima solemos como se dice popularmente “echarle más leña al fuego” ¿Es un mal día o sólo nuestra perspectiva?

Si atravesamos por una situación amorosa negativa es usual esta situación: activar el playlist de canciones tristes e ir directamente a la repisa en búsqueda de nuestra bebida alcohólica favorita, y vaya si tenemos una compañía a quién contarle la situación y dramatizar todas nuestras penas mucho mejor ¡a brindar! No somos conscientes que esta conducta sólo perjudica nuestro estado de ánimo, estar en sintonía con esa atmósfera hace ver de una etapa una tragedia. 

Si estamos de mal humor, cualquier cosa nos parece desagradable, nos molesta cualquier ruido, y pasamos con el ceño fruncido durante el día. Parece que todo conspira en nuestra contra ¿te parece familiar la situación? ¿Viviste algún día un episodio similar?

Pues no, no es casualidad que lo que llaman un mal día sea efectivamente un mal día, puesto que es una correspondencia exacta de tu vibración, y te pido un favor, no me creas esto porque está escrito aquí, ve y experiméntelo, también puedes observarlo de las experiencias ajenas

“El inteligente aprende de sus errores, pero el sabio de los errores de los demás”

Un conductor que está molesto se le presentaran durante todo el camino situaciones que incrementen su estado de irritabilidad. Hasta parece que los semáforos le juegan bromas de mal gusto.

Alguien que tiene una actitud grosera en algún sitio dónde le brindan un servicio, siempre pensará que el servicio es malo, su vibración negativa, amplía los errores y no le permite ver los aciertos, y lo bueno de la vida queda tras una cortina de sombras.

Las personas mal humoradas, llena de quejas, mal intencionadas, y aquellas que descargan su veneno emocional para con los demás, creen que es ficción que la vida es ligera, armoniosa, y que responde a tu vibración, a tu energía, a tu disposición, y por supuesto hágase según tu voluntad.

Todos hemos tenido el peor día de nuestra vida, porque reaccionamos a un suceso, nos cambió la frecuencia y el resto de la jornada fue correspondiendo a la vibración. Cambiar de frecuencia sólo nos toma unos segundos, invirtamos unos segundos para tranquilizar la mente, los pensamientos, alimentar las emociones y sentimientos con energía de luz, esta práctica es un atrayente poderoso para que todo empiece a fluir de la manera que tú decidas, puede que no tomes esta filosofía como una verdad, y pienses que todo está predestinado, pero te invito a que lo intentes, míralo como un juego y aprende a jugar, es divertido cuando empezamos a ganar; porque el reino está dentro de ti.

Procedimientos:

·         Recuerda que existe el reflejo / espejo: Todo se corresponde a tu interior, mala vibración, mal día.

·         Domina tu espacio energético, percibe como te sientes, y si encuentras una vibración negativa cámbiala a positiva, cambiando tus pensamientos.

·         Cuando pases por un mal momento, no trates de ir en contra, ya que se te presentará varias veces, mejor cambia de sintonía, lee, haz ejercicio, yoga, pinta, escribe… ¡Pero cambia de frecuencia!

Decretos:

·         Yo soy el creador de mi realidad, yo estoy siempre en vibración de luz.